Es un pueblito típico y pintoresco del Sur de Chile con 3500 habitantes ubicado en el lado Norte del Lago Llanquihue que es el más grande de los 10 maravillosos lagos de la Región. Posee una bahía protegida que permite la práctica de diferentes deportes náuticos y un panorama espectacular a los majestuosos volcanes nevados que hacen de nuestra zona única en el mundo.
En la arquitectura predomina la influencia de la colonización alemana que tuvo lugar a mediados del siglo XIX. Hermosas casonas de madera nativa y sus antiguos jardines se ubican a menudo junto al camino. Se puede apreciar también en las vastas y escarpadas praderas el pastoreo de grandes rebaños.
En los alrededores el paisaje cambia muy sutilmente desde suaves colinas en las cercanías de los lagos Rupanco y Llanquihue, hasta llegar a bosques con exuberante vegetación nativa propia de esta zona. El equilibrio del hermoso entorno natural entrega la oportunidad para realizar muchas actividades al aire libre como: caminatas, montañismo, cabalgatas, ciclismo, velerismo, pesca y canotaje.
Más aún, la forma de vida tradicional del sureño junto al toque místico del paisaje son una inspiración para todo aquel que disfruta del arte de la fotografía, el dibujo o la pintura.
Te invitamos a visitarnos y descubrir esta excepcional parte de Chile
Recorriendo casas patrimoniales de Puerto Octay
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